El Kremlin en alerta tras la muerte de Prigozhin en accidente aéreo

El reciente y trágico accidente aéreo en la región de Tver ha sumergido a Rusia en una vorágine de tensiones políticas y militares. El jet privado que se estrelló transportaba a Yevgeny Prigozhin, líder del controvertido Grupo Wagner.
Esta tragedia se suma a los desafíos que ya enfrentaba el Kremlin, dado que solo dos meses antes, Prigozhin había liderado un fallido levantamiento, denominándolo “Marcha de Justicia”, marcando el desafío más significativo a la administración de Putin desde su ascenso al poder en 1999.
En respuesta al accidente, varios canales de Telegram vinculados al grupo Wagner han lanzado advertencias veladas, insinuando represalias contra figuras clave como el presidente Putin y el Ministro de Defensa Sergei Shoigu, con muchos especulando sobre su posible participación en el siniestro.
Un canal de Telegram vinculado al Grupo Wagner manifestó: “Si se confirma la información sobre la muerte de Prigozhin, organizaremos una segunda ‘Marcha de Justicia’ en Moscú”.
Estas palabras no solo reflejan la ira y el sentimiento de venganza que prevalece entre los miembros del grupo, sino que también subrayan la delicada situación en la que se encuentra el país. Las especulaciones y acusaciones están a la orden del día, y la confianza en el gobierno parece estar erosionándose a un ritmo acelerado.
Edward Lucas, reconocido experto en políticas europeas, argumentó que lo sucedido evidencia la volatilidad inherente del sistema político ruso: “En un sistema político estable, no te enfrentas a tus oponentes derribando su avión con un misil antiaéreo”.
Lucas concluyó su análisis con una predicción sombría: “El sistema es frágil y otra fisura es inevitable. Todos en el círculo íntimo de Putin están justificadamente paranoicos, preguntándose quién será el siguiente en caer”.