China avanza en su plan de establecer una base naval en Cuba para espiar a Estados Unidos
China está llevando a cabo un plan para establecer una base naval en Cuba con el fin de espiar a Estados Unidos y expandir sus actividades de inteligencia. Este proyecto, conocido como Proyecto 141, es parte de un acuerdo de seguridad militar entre ambos países, cuyos gobiernos comparten una afinidad comunista.
Según informes, las negociaciones para la nueva base naval están en una etapa avanzada, al igual que las relacionadas con la instalación de puestos militares en Camboya y los Emiratos Árabes Unidos. Esta sería la segunda base militar china fuera de la región del Pacífico, después de la ya existente en Yibuti, en el Cuerno de África.
La nueva base naval en Cuba ampliaría la cooperación militar entre China y Cuba, que ya incluye la administración conjunta de cuatro estaciones de espionaje. Funcionarios estadounidenses sospechan que estas estaciones están operando y un informe de inteligencia de Estados Unidos indica que la gestión de estos sitios conjuntos está centralizada. Aunque se espera una mayor coordinación de seguridad, el proceso se llevará a cabo gradualmente, según fuentes consultadas por el Wall Street Journal.
Tanto China como Estados Unidos han confirmado la existencia de instalaciones de recopilación de inteligencia china en Cuba desde hace varios años. Sin embargo, las autoridades chinas han negado estas afirmaciones. El Proyecto 141 ha generado tensión entre los dos países, pero recientes imágenes satelitales muestran el avance de la base naval china en Camboya, lo que respalda las sospechas sobre la cooperación militar entre ambos países.
Estas acciones de China en América Latina también son motivo de preocupación. Se ha informado que China está expandiendo su influencia en la región a través de la iniciativa de la Franja y la Ruta, controlando puertos y proyectos de infraestructura desde México hasta Argentina. Además, China busca utilizar el puerto de Punta Arenas en Chile para la explotación de la Antártida y presiona a Argentina para construir una base naval en Ushuaia, provincia de Tierra del Fuego, como una entrada estratégica hacia el continente blanco.